El aislamiento térmico de una vivienda tiene gran parte de la responsabilidad cuando hablamos de eficiencia energética. Es importante tener una buena instalación aislante para ahorrar en las facturas energéticas y tener una casa de lo más eficiente. Hoy te contamos todo al respecto sobre por dónde pierde energía una casa.
Aislamiento térmico para tu vivienda
El aislamiento térmico de la vivienda es un factor importante si queremos tener una casa eficiente. No solo debemos preocuparnos de pensar qué sistema de calefacción o aire acondicionado es el más apropiado para las características de nuestro hogar, sino que este debe estar correctamente aislado para no perder energía y, por lo tanto, acabar gastando más en las facturas energéticas.
Aislar una vivienda, tanto desde el interior como la fachada, es una inversión que se amortiza muy rápido. La pérdida de energía, tanto en invierno como en verano es algo que incrementa considerablemente el importe de las facturas energéticas del hogar. Con un buen aislamiento se puede evitar eso.
¿Por dónde pierde energía una casa?
Una casa puede perder energía en forma de calor o frío a través de muchos lugares. Un buen aislamiento térmico evita que esto ocurra. Además del aislamiento de paredes y techo, también hay que tener en cuenta otras zonas para aislar una casa correctamente. Las ventanas y la puerta también pueden ser lugares por donde se pierda energía y para ello podemos contar con ventanas de doble cristal, aislantes, y una puerta de entrada también aislante.
En cuanto al aislamiento de las paredes y techos, en función del tipo de edificio donde vivíamos, tendremos que tener en cuenta diferentes factores. No es lo mismo aislar un piso dentro de un bloque, que instalar el aislamiento térmico en una casa individual, donde hay que tener en cuenta el tejado también.
En una comunidad de vecinos, correrá a cargo de la propia comunidad el aislamiento exterior y el aislamiento del tejado. Mientras que cada propietario podrá aislar de forma individual el interior de sus casas, así como instalar ventanas y puertas aislantes.
Los diferentes aislantes térmicos
En cuanto al aislamiento térmico para una vivienda, existen diferentes materiales y sistemas en función del lugar donde se quiera instalar. No es lo mismo el exterior de una vivienda, que las paredes interiores, el suelo o el tejado.
- Para las paredes exteriores de una vivienda o un edificio de pisos, existe el Sistema SATE. Se trata de un aislamiento térmico pero también acústico para la fachada de los edificios. Se trata de un aislante que se lleva a cabo a través de una obra donde mediante fijación mecánica y adhesiva se cubre la fachada con una capa de aislamiento. Esto implica una reducción de la pérdida de energía en una vivienda hasta de un 70%.
- Entre otro tipo de aislamientos exteriores podemos hablar del insuflado de Aislafoam, que implica una obra de instalación bastante breve, tan solo de un día. El poliestireno expandido es otro aislamiento térmico para las fachadas. Se instala mediante planchas rígidas de este material.
- En cuanto al aislamiento térmico interior de una vivienda, podemos hablar de diferentes materiales. La lana mineral es uno de los materiales más habituales para el aislamiento interior. La lana de roca se fabrica con roca basáltica. La fibra de vidrio también es otro aislante térmico para el interior, fabricado con roca silícea.
- En Pimat también ofrecemos otros aislamientos como el Isobead. Este es un sistema muy utilizado para aislar cubiertas, áticos o buhardillas, paredes de yeso laminado o falsos techos entre otros. Y su empleo tiene grandes ventajas: es un material no tóxico y muy duradero, tiene un aditivo retardante al fuego y se trata de un material reutilizable.
Si estás interesado en el aislamiento térmico de una vivienda, no dejes de ponerte en contacto con nosotros para resolver cualquier duda o pedir un presupuesto personalizado. También puedes leer otros posts sobre eficiencia energética y los aislantes térmicos en nuestro blog.